Luis Blasini, gerente deportivo del Magallanes ya asomó esa posibilidad. Jean Machí será uno de los hombres llamados a cerrar encuentros para el buque en el primer mes de temporada.
Por su parte, el oriundo de El Tigre, Anzoátegui, parece el idóneo en pro de apagar el fuego cuando la ocasión lo amerite en las primeras de cambio, una responsabilidad que asume sin problemas.
“Me siento listo para salvar partidos. En Triple A y Doble A (Piratas de Pittsburgh) me dieron esa oportunidad terminando la temporada y cumplí, entonces no veo por qué no pueda hacerlo aquí”, alega Machí.
El taponero de 26 almanaques cerró el candado en las 12 ocasiones que se le presentaron en las Menores (seis con el Indianápolis y seis en el Altoona), suficientes credenciales a fin de hacer lo propio en beneficio de una escuadra carabobeña que en las recientes justas ha poseído en el bullpen su punto más débil.
“Es cierto que en los dos años más recientes el relevo no ha estado a la altura, pero ahora tenemos un talento que quizás no existía antes y eso lo sabe el manager Carlos García y lo sabemos nosotros”.
Aunque trabajó durante 51.2 entradas a nivel ligaminorista en la contienda finalizada, el diestro no presenta de momento ninguna restricción para aportar su grano de arena a la entidad naviera.
“La gente de los Piratas no me ha dicho nada, pienso lanzar desde el principio hasta el final de campaña”, comenta Machí, quien a su poderosa bola rápida (promedia 95 millas) ha agregado un cambio de velocidad que saca de ritmo a los paleadores.
En torno a sus chances de recibir una invitación al Spring Training de 2010, el lanzallamas se apega a la fe para lograr la gesta de recalar en el “big show”.
“Hablé con mi abogado ayer (domingo) y me dio la noticia de que Pittsburgh quiere firmarme de nuevo, con una invitación a los entrenamientos primaverales. Ojalá llegue a darse porque no hay nada que desee más que una oportunidad en las Grandes Ligas”, concluye.
No hay comentarios:
Publicar un comentario